jueves, 17 de febrero de 2011

¿Un deseo? Ser feliz...

Un día le dije a una amiga haciendo el tonto: “venga, pide un deseo”. Tardo tanto en contestarme que pensé “vaya, que bien vive ¿no? Le digo que pida un deseo y no se le ocurren apenas cosas ¿será que le basta con lo que tiene?”. Y es que mucha s personas suele pensar en sus mentes, en las cuales me incluyo, “mmm ¿un deseo? Ser feliz” ¿Ser feliz? ¿Por qué? Es que acaso eres tan poco feliz en tu día a día que lo ves como una aspiración, como una meta.

Voy a contarte un secreto, incluso más importante que el misterioso ingrediente de coca-cola, ser feliz no es un deseo, es un hecho, otra cosa es que uno no se dé cuenta a veces.

Hemos situado a la felicidad en un lugar tan inalcanzable en nuestra mente. La hemos metido en un paquete y lanzado a la cúspide de la pirámide más alta.

¿Porque la situamos en un punto tan inaccesible para nosotros? ¿Por qué la tenemos tan sobrevalorada, tan especial, tan irreal? como si de una utopía se tratase ¿Por qué soñamos con ser felices, como si únicamente se quedara en un sueño? Exigimos demasiado a la felicidad, tanto que la hemos vuelto casi imposible.

Como nos gusta enredarlo todo. Porque no mejor vivir, sin cuestionarse, sin pensar demasiado, únicamente actuando, sin poner objetivos y exigirnos cada día si nos los logramos. Como nos gusta complicarnos…La razón, muy simple, porque somos seres humanos.

Luego nos andamos quejando de ¿Por qué todo tan difícil?

Si lo piensas bien: ¿Dónde estaría la emoción si todo lo que queremos lo pudiéramos alcanzar sin apenas esfuerzo? Si no hubiera barreras en nuestra vida que nos hicieran enloquecer, gritar, buscar mil respuestas y finalmente ganar ¿Qué gracia tendría la vida? Acabaríamos aburridos si todo fuera tan sencillo que lo pudiéramos entender y tan fácil que lo pudiéramos hacer.

Esas murallas que se interponen en nuestra travesía son las que dan sentido a la vida, las que nos definen, nos forman, nos hacen cambiar, reinventarnos y finalmente superarnos.

“La felicidad es darse cuenta que nada es demasiado importante”

Antonio Gala

4 comentarios:

  1. Me encanta vane, estoy de acuerdo contigo en que la felicidad esta sobrevalorada, hay que conseguirla atendiendo a esos pequeños detalles que realmente son lo que componen tanto la vida como la felicidad! =D

    ResponderEliminar
  2. Me ha encantado Vane, ya lo sabes :)

    ResponderEliminar
  3. Una entrada muy muy bonita. Me ha gustado un monton. Creo que la felicidad no es la meta sino el camino.
    PRECIOSO VANE!! =D

    ResponderEliminar
  4. Vane, eres una crack, estoy de acuerdo con lo que dices, aunque quizás sea muy fácil escribirlo y muy difícil ponerlo en práctica, vivir actuando...sin pensar...hoy hemos hablado algo parecido...y sí, es muy difícil actuar, aunque no hacerlo te llene de incertidumbre.
    Aun así estoy de acuerdo contigo en que la felicidad está sobrevalorada y que realmente está en las cosas pequeñas, como no sé, por ejemplo en pasar una tarde con unas amigas por la calle comiendo Kinder Schoko-Bons ;)

    ResponderEliminar